viernes, 20 de junio de 2008

Proyectos Misioneros Transformadores:La experiencia de la CBU-PUCP Conexión Bíblica Universitaria


Son más de 30 años que la Conexión Bíblica Universitaria viene desarrollando su labor de testimonio cristiano evangélico en la Pontificia Universidad Católica del Perú. La CBU-PUCP ha sido la cuna de muchos líderes evangélicos peruanos que el día de hoy son pastores y profesionales que sirven a Dios desde su vocación de transformación de la Iglesia y la sociedad civil. En los tiempos actuales la CBU-PUCP es un grupo formal y reconocido por su Casa de Estudios gracias al prestigio de vocación y servicio que caracteriza a esta comunidad de jóvenes discípulos de Jesucristo y misioneros en la Universidad Peruana.

Es así, que como parte de su labor misionera formativa la CBU-PUCP organizó el taller de formación para dirigentes cristianos este sábado 14 de junio , donde Oscar Amat y León, Director del Instituto para la Misión Transformadora (IMT) estuvo a cargo de la ponencia: “Las dimensiones de la misión cristiana a la luz del Reino de Dios”, a través de la cual propuso que las dimensiones de la misión de la iglesia en las comunidades cristianas están en relación directa con la concepción que se maneje sobre Reino de Dios. afirmando que “Una concepción estrecha (o peor aun la ausencia) de las implicancias del Reino de Dios en la vida de la Iglesia produce una concepción mutilada de las dimensiones de la misión de la Iglesia”.

“Buscamos orientar bases y principios al servicio de los jóvenes que pretendemos alcanzar”

Luis Cotera, coordinador general, dialogó con nosotros,al respecto del evento, en una breve entrevista:

¿Qué expectativas tienen de este taller?

Lo que pretendemos alcanzar es colocar los fundamentos o las bases teológicas con las que trabaja la CBU porque la labor de la universidad el día de hoy, no esta sólo dentro de las áreas con las cuales organizamos el grupo que son: Evangelización, servicio, formación, relaciones y mayordomía; sino que la misión de la Iglesia se integra y comparte las necesidades que tiene la Universidad, los jóvenes que pretendemos alcanzar y las mismas necesidades que tenemos como grupo para desarrollarnos.

Estamos hablando, entonces de una concepción más integral de la misión de la Iglesia que abarca no sólo las necesidades espirituales de los jóvenes evangélicos, sino que es una propuesta que los involucra y moviliza a transformar su medio, cuéntanos Luis, ¿Cuál es el próximo paso a dar?

La propuesta inmediata es profundizar lo aprendido en este taller por medio de debates en conversatorios internos, que se realizarán todos los martes, el propósito es desarrollar un análisis y diagnóstico de la realidad de la universidad y del grupo con todas las herramientas que tenemos, reorientarlo nuestra labor al servicio de la Universidad y también encontrar el propio cauce para la misión en la Universidad.

Este esfuerzo de contextualización del Evangelio que están realizando es realmente importante, por lo que escucho, es mucho más que reproducir los cultos de una iglesia al interior de la Universidad. ¿Puedes comentarnos alguna anécdota en este tiempo de quehacer misionero universitario?

Ah bueno sí, Cuando comencé ya tenía la experiencia de ser coordinador hace un año, y de ser miembro hace año y medio de la CBU-PUCP. A pesar de tener delante de mí un grupo que ya conocía bien y que a su vez teníamos una estructura organizacional muy buena. Sin embargo, en el transcurso del desarrollo de las funciones que tengo ahora, me di cuenta que se necesitan más cosas para hacer bien la tarea. Y esas cosas no están sólo en los libros o no son sólo propias de Dios, sino que ya están en medio de nosotros, de los miembros que ya conforman el grupo, incluso de los que recién llegan y son nuevos, ya que tienen nociones, sueños, esperanzas, dudas y también problemas; que son la raíz, el punto de partida que buscamos para poder impactar: primero para ser impactados por Dios y luego impactar a nuestra universidad. Entonces es algo así como paradójico que en los problemas está la solución, en las carencias está la plenitud y de repente eso es lo que más me ha asombrado y me ha ayudado a desarrollarme como coordinador general y como cristiano.

No hay comentarios: